Volver al proyectoPlataforma de aprovechamiento integral de frutales andinos
El proyecto impulsa la producción orgánica y la innovación tecnológica en cadenas de frutas andinas, beneficiando a pequeños productores y procesadores en Colombia.
El contexto de la historia
La producción mundial de frutas ha crecido un 3% anual en la última década, con Colombia posicionándose como el quinto productor de frutas en América Latina. Sin embargo, las cadenas de frutas andinas enfrentan desafíos comunes como la inestabilidad de precios, intermediación excesiva, falta de asistencia técnica, y deficiente planificación de cultivos. Estas problemáticas afectan principalmente a pequeños productores, donde las mujeres juegan un papel crucial.
Empoderamiento y sostenibilidad en la cadena frutícola.
La iniciativa implementada
El proyecto estableció Grupos de Transformador-Agricultores (GTA) para facilitar la transferencia de conocimientos y tecnología. Se enfocó en la caracterización, tipificación, y zonificación de cultivos, así como en la preservación de la calidad poscosecha, desarrollo de productos innovadores, y promoción del consumo, tanto a nivel local como internacional. Finalmente, se plantearon diferentes estrategias de comunicación a través de productos académicos, productos de divulgación y actividades de contacto masivo.
Introducción de variedades mejoradas y prácticas agrícolas sostenibles.
La solución tecnológica
Se promovió una nueva variedad de mora sin espinas con un rendimiento cuatro veces superior al promedio nacional, y se impulsó el cultivo de lulo con rendimientos tres veces mayores. Además, se sustituyeron los químicos inorgánicos por productos biológicos y se promovieron buenas prácticas agrícolas, lo que permitió la certificación orgánica de productos, abriendo mercados en Europa. También se desarrollaron nuevos productos a partir de los residuos de cosecha.
Se alcanzó una mejora importante con respecto a temas de desinfección de materiales de trabajo, disminución de enfermedades y plagas y cumplimiento de buenas prácticas agrícolas.
Colombia
EspañaResultados
El proyecto logró aumentar significativamente la productividad de cultivos como mora y lulo, superando los promedios nacionales.
Se observó un incremento del 40 % en el uso de controles biológicos y culturales.
La empresa Frugy logró la certificación orgánica de sus pulpas de fruta accediendo a un nuevo nicho en los mercados europeos.
Se desarrollaron prototipos de productos basados en distintos tipos de residuos.
Se estudió el uso de residuos lignocelulósicos y sus aplicaciones potenciales como empaques, partes para vehículos, soportes para enzimas y materiales de construcción.
Se lanzaron dos barras de fruta (mora y guayaba) que se encuentran actualmente en el mercado.
El proyecto benefició directamente a 400 familias y de manera indirecta a 800 más en la zona andina colombiana.
Se capacitaron a 1276 personas y se realizaron una tesis de grado, tres de maestría y dos de doctorado.
Organizaciones participantes
