Papas nativas resilientes: Salvaguardando la seguridad alimentaria
En Bolivia y Perú, trabajaremos con comunidades indígenas para preservar la diversidad genética de papas nativas, mejorando la seguridad alimentaria frente al cambio climático.
El contexto de la historia
En el Altiplano de Bolivia y zonas andinas de Perú, la agricultura está enfrentando eventos climáticos extremos como sequías, heladas y granizadas, que ponen en riesgo la seguridad alimentaria de las comunidades. La diversidad de papas nativas, que históricamente ha sostenido la alimentación de las poblaciones indígenas, se encuentra en peligro por el cambio climático y el desplazamiento de variedades autóctonas. Este proyecto busca revertir esa situación mediante la recuperación, caracterización y mejoramiento de alguna variedad de papa nativa resistente a condiciones adversas.
Protegiendo la diversidad de papas nativas
La iniciativa implementada
Nos centraremos en la recuperación y fortalecimiento del cultivo de papas nativas en Bolivia y Perú, donde estas variedades desempeñan un papel fundamental en la seguridad alimentaria y la identidad cultural. En colaboración con la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) en Bolivia y el Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA) en Perú, el proyecto combina conocimientos ancestrales con tecnología moderna, como el mejoramiento genético asistido por marcadores y el monitoreo de cultivos con drones. La capacitación de agricultores en prácticas sostenibles y el fomento del mercado de papas nativas buscan promover la resiliencia climática y la sostenibilidad socioambiental y económica, salvaguardando un recurso genético clave.
Innovación en fitomejoramiento y prácticas sostenibles
La solución tecnológica
Utilizando técnicas avanzadas como el mejoramiento genético asistido por marcadores moleculares, identificaremos y desarrollaremos una variedad de papa con alta resistencia a condiciones extremas como las sequías. Esta variedad será cultivada en parcelas experimentales donde se comparen métodos de labranza completa y labranza cero, además del uso de terrazas agrícolas ancestrales (en Bolivia) y la influencia de las fases de la luna (en Perú). Adicionalmente, implementaremos el uso de drones (con cámaras RBG en Bolivia y multiespectrales en Perú) para monitorear la salud y desarrollo de los cultivos, evaluando así la eficacia de estas metodologías con los agricultores.
A través de capacitaciones y escuelas de campo, el proyecto buscará trabajar con los agricultores locales para determinar las mejores prácticas para el cultivo de papas nativas y el empleo de tecnologías, fomentando el uso sostenible de los recursos hídricos y de suelo, promoviendo la resiliencia climática de las familias.
“Rescatar las papas nativas es conservar nuestra herencia cultural y fortalecer un futuro resiliente para nuestras comunidades”
Tipo de Proyecto
Resultados
Combinando los saberes ancestrales con el conocimiento científico, esperamos lograr una mejor producción del cultivo de papas nativas, beneficiando a productores e impulsando la revalorización de un recurso genético de gran importancia para el futuro de nuestros países. Las papas nativas han sufrido por años la erosión de su valor cultural debido a las demandas de un mundo industrializado y globalizado. Afortunadamente, estamos en un momento en el que se está revalorizando y recuperando la diversidad de productos nativos, gracias a apertura de mercados de comercio justo y economía solidaria, al movimiento gastronómico de innovación y fusión y a otros factores, que nos ayudarán a dar un giro positivo en la percepción de los agricultores sobre el valor cultural, biológico y económico de estos productos milenarios.