Bienestar animal: un enfoque innovador para la ganadería resiliente
Contribuir a la resiliencia de sistemas ganaderos, con foco en “Un Bienestar”, al implementar buenas prácticas ganaderas para bovinos y ovinos basadas en los principios de bienestar animal.
El contexto de la historia
El crecimiento sostenible de la ganadería es un desafío clave en América Latina y el Caribe, frente a una mayor demanda de productos con calidad, bienestar animal y sostenibilidad. Argentina, Chile y Colombia, importantes proveedores de carne, leche y lana, enfrentan impactos del cambio climático que afectan especialmente a pequeños y medianos productores. Esta iniciativa promueve un enfoque integral de “Un Bienestar” —animal, humano y ambiental—, integrando saberes técnicos y tradicionales. A través de Buenas Prácticas Ganaderas adaptadas a cada región, busca fortalecer la resiliencia de las fincas, reducir pérdidas, mejorar la productividad y avanzar hacia una ganadería más sostenible e innovadora.
Fortalecer la capacidad co-participativa de comunidades ganaderas para implementar las BPGs-BA y difundir los resultados de su adopción
La iniciativa implementada
La plataforma regional de co-innovación consolidada ya abarca seis ecorregiones: desde el altiplano y los llanos orientales de Colombia, pasando por las sabanas del noreste argentino y la Patagonia, hasta los valles del centro y sur de Chile. A través de talleres co-participativos, técnicos, productores, comunidades mapuche, cooperativas, universidades e instituciones identificaron y priorizaron Buenas Prácticas Ganaderas con foco en Bienestar Animal para adaptarlas a cada realidad. El objetivo es tejer redes locales que generen soluciones sostenibles con identidad territorial, respeto cultural y compromiso compartido.
Desarrollar y validar, a través de una plataforma regional de co-innovación pone en valor las tecnologías de proceso junto a los productores, para elevar los índices productivos y mejorar la resiliencia de los sistemas ganaderos de cada país.
La solución tecnológica
La plataforma regional de co-innovación permitió identificar y priorizar Buenas Prácticas Ganaderas con enfoque en Bienestar Animal (BPG-BA) mediante una metodología co-participativa basada en tecnología social intercultural, articulada con indicadores productivos locales. En Argentina, productores bovinos del noreste priorizaron el uso estratégico del forraje, el bienestar del ternero, el manejo en manga y los tratamientos sanitarios; mientras que en la Patagonia, comunidades mapuche priorizaron mejoras en la señalada, esquila y manejo reproductivo. En Colombia, se destacaron prácticas como la esquila pre-parto, salud podal y control de parásitos en el altiplano, y el manejo del estrés térmico, del dolor y los sistemas silvopastoriles en los llanos. En Chile, un diagnóstico participativo definió una hoja de ruta para abordar desafíos de la ganadería lechera y el bienestar de bueyes de trabajo, integrando estos al enfoque de Un Bienestar y los ODS.
El desarrollo de capacidades es esencial para mejorar el bienestar animal en la práctica, permitiendo a los ganaderos y a las comunidades aumentar la productividad, reducir el estrés y las enfermedades, y mejorar los medios de subsistencia.
Países participantes
Tipo de Proyecto
Resultados
En el primer año se reafirmó el compromiso de los organismos co-ejecutores y asociados para construir una línea base sobre prácticas y tecnologías vinculadas al Bienestar Animal en bovinos y ovinos. Se realizaron eventos de socialización y siete talleres co-participativos con 188 actores locales, generando una memoria y cuatro notas técnicas con resultados preliminares. En Argentina se promovió el enfoque “Un Bienestar” en la ganadería familiar con identidad territorial. En Chile se definieron prioridades en el sector lechero, integrando el bienestar animal a procesos clave. En Colombia se identificaron prácticas y se iniciaron planes de acción en unidades demostrativas piloto, articulando saberes técnicos y tradicionales. La iniciativa fortaleció redes locales, identificó al menos ocho unidades demostrativas y promovió herramientas y aprendizajes para avanzar hacia sistemas ganaderos más resilientes, sostenibles e inclusivos.